Empresas líderes como Hershey’s, Kellogg’s, PepsiCo y Sam’s Club están modificando sus productos para alinearse con una tendencia en crecimiento: ofrecer alimentos más naturales y libres de aditivos artificiales. Esta transformación responde al auge de campañas como Make America Healthy Again, iniciativa respaldada por el expresidente Donald Trump y el secretario de Salud Robert F. Kennedy Jr., que busca mejorar la calidad alimentaria en EE.UU. eliminando ingredientes sintéticos como los colorantes FD&C.
Una encuesta de Mintel reveló que el 50% de los consumidores están dispuestos a pagar más por productos sin colorantes artificiales, impulsando a la industria a hacer cambios importantes en sus formulaciones. Mientras tanto, el INEGI reporta que el consumo de alimentos poco saludables ha aumentado un 38% en los últimos años.
Compromisos clave de las marcas
Hershey’s anunció que eliminará todos los colorantes artificiales de sus snacks antes de finalizar 2027.
Kellogg’s informó que el 85% de sus productos ya están libres de estos aditivos y que, para 2027, habrán erradicado su uso por completo, incluyendo cereales servidos en escuelas a partir del ciclo escolar 2026-2027.
Sam’s Club, a través de su línea Member’s Mark, eliminará más de 40 ingredientes cuestionables —incluido el aspartamo— antes de que termine el año, como parte de su programa Made Without, pensado para consumidores de generaciones jóvenes como millennials y Gen Z.
Incluso Donald Trump ha sugerido que Coca-Cola podría volver a utilizar azúcar de caña en lugar de jarabe de maíz, destacando un esfuerzo más amplio por ofrecer opciones más saludables sin comprometer el sabor original.
México también toma acción
En el ámbito local, Kellogg’s México acordó con la Profeco eliminar el colorante rojo 3 de los cereales Froot Loops, un ingrediente prohibido por la FDA. El senador Ricardo Sheffield Padilla comunicó este avance tras reunirse con representantes de la empresa.
“Muy pronto, las familias de México verán desaparecer el rojo 3 de los Froot Loops. Un avance importante para la salud de los más pequeños”, compartió el legislador.
Una nueva era para la industria alimentaria
Lo que comenzó como un movimiento de nicho se está convirtiendo en una transformación estructural. Con mayor regulación, presión social y consumidores más informados, la industria se encamina hacia la transparencia y la reformulación de productos. En lugar de ser una restricción, esta evolución representa una oportunidad para innovar: desarrollar alimentos con colorantes naturales derivados de plantas como el betabel o la espirulina, e introducir tecnologías más limpias.
Según un informe del Environmental Working Group, más del 90% de los productos ultraprocesados dirigidos a niños contienen al menos un colorante artificial. Y estudios del Center for Science in the Public Interest han vinculado varios de estos aditivos con posibles efectos negativos en la salud infantil, como alergias y alteraciones del comportamiento.